Quizá este post no guste a todo el mundo, y alguien pueda llegar a sentirse ofendido pero queremos dejar claro que no es nuestra intención. Solo queremos desahogarnos y hablaros un poco sobre el tema del pago por adelantado o una pequeña señal en los juegos de escape a la hora de hacer la reserva.
Antes de nada dejaremos muy claro que los juegos de escape somos empresas dedicadas al ocio, sí, pero no somos hermanitas de la caridad ni trabajamos por amor al arte. Nos ganamos la vida con esto.
Cualquier empresa quiere obtener beneficios y no generar pérdidas. Y desgraciadamente muchas empresas de juegos de escape han tenido que tomar la decisión de poner el pago por adelantado o al menos una parte para poder reservar. ¿Y por qué? Os preguntareis…
Pues porque la cantidad de reservas no presentadas, falsas o con excusas de risa han visto mermados los beneficios de estos juegos de escape.
Excusas como:
“Mi abuela está en el hospital” “He pinchado una rueda del coche” “Mi perro se ha comido la reserva” “Al final me venía mal” “No me he acordado”
No dudamos que alguno de estos motivos, alguna vez, puedan ser verdad, pero cuando cada semana los oyes una y otra vez dejan de parecer creíbles. En estos casos al menos recibes una respuesta. Pero hay veces en las que el grupo desaparece de la tierra y nunca más se supo de ellos. Teléfonos apagados, llamadas que nunca te responden, números que no existen…
¿Qué supone para la empresa que un grupo con reserva no pagada no acuda?
Primero y principal, la empresa PIERDE DINERO. Si si lo pierde. Lo pierde porque el importe de esa reserva no se ingresa, porque ese grupo que no acude y no ha dado la oportunidad a otro grupo a ir. Pierde dinero porque el trabajador ha ido a trabajar y evidentemente tendrá que cobrar, sueldo que pagará la empresa de su bolsillo sin haber ingresado ni un céntimo. Pierde dinero porque esperando a ese grupo que no aparece el trabajador tiene listo el juego, con los gastos de luz los que ello conlleva.
¿Qué pretenden las empresas cobrando por adelantado?
Básicamente, NO PERDER DINERO. Que el cliente se asegure de que realmente podrá acudir a la hora que ha reservado. Y en el caso de que el grupo no se presente tener cubiertos al menos algunos de los gastos generados. Porque hay gastos ocultos que no se ven, pero están ahí.
Aprovechamos este post para hablar también de las cancelaciones o devoluciones.
Normalmente los juegos de escape tienen un amplio abanico de días y horas para elegir, cada cliente elige el día y la hora que le viene bien, nadie le obliga a escoger una fecha y una hora en concreto. ¿Por qué no se puede cancelar esa reserva o devolver el dinero? Por el simple hecho de que al usar la web con su pasarela de pago ya se han generado gastos a la empresa, que a la hora de devolver el dinero al cliente, tendría que afrontar la empresa.
Queremos poner el ejemplo del cine, teatro o conciertos, donde se compra una entrada donde aceptamos que no hay cambios ni devoluciones. Si finalmente por cualquier motivo no se puede ir, ni Beyonce, ni Concha Velasco, ni Javier Bardem nos van a devolver el dinero de las entradas. Porque damos por hecho que hemos aceptado unas normas y que las cosas son así, no se pueden devolver las entradas. ¿Por qué no se puede comprender que en los juegos de escape es igual?
Dependiendo de la empresa se permiten cambios de día u hora, lo normal es poder cambiar una reserva antes de 72 horas de la misma. Para que a la empresa le dé tiempo a gestionar horarios y dar la oportunidad de que otro grupo pueda jugar en esa hora.
Comprendemos que hay imprevistos, malos momentos o situaciones imposibles de controlar que afectan a cada persona. Al cabo de la semana recibimos decenas de llamadas para anular la reserva por cualquier tipo de contratiempo. Pero lo que queremos que se llegue a comprender, es que las empresas de juegos de escape no podemos asumir todos esos problemas de cada uno de sus clientes. Son los gastos de una reserva multiplicados por decenas.
